{ARTÍCULOS DE OPINIÓN}

'Castigo'

Anne Holt , referente de la literatura policiaca escandinava

Anne Holt es un referente de la literatura policíaca escandinava y lleva ya 16 novelas escritas. Es una de las autoras más populares de Noruega, publicada en 25 países y con más de tres millones de ejemplares vendidos en Alemania y los países nórdicos. Y un dato curioso, Holt fue Ministra de justicia de Noruega.

Entre sus libros destacan dos sagas negras de mucho éxito. La primera de ellas y con la que debutó como escritora es la dedicada a la detective de policía lesbiana Hanne Wilhelmsen, sobre la que ya ha publicado siete títulos. Dos de ellos, 'La diosa ciega' y 'Bienaventurados los sedientos', se convirtieron en una serie de televisión y fueron adaptadas al cine.

La otra serie es de la que vamos a hablar hoy. Se trata de la protagonizada por Inger Johanne Vik, una psicóloga que en el pasado trabajó como profiler para el FBI, y el comisario Yngvar Stubo del servicio de criminología noruego, que cuenta con 5 entregas. Y vamos a empezar por el principio, por la primera novela de esta saga: 'Castigo'.

'Castigo' nos lleva a un frío sótano en algún lugar de Noruega donde se halla encerrada Emilie, una niña de nueve años. La pequeña no sabe dónde está ni el motivo de su encierro. Tampoco sabe quién es el hombre que regularmente le da comida y bebida, pero su instinto le dice que se comporte bien con él.

Los días se suceden, la policía no es capaz de dar con Emilie y la intranquilidad se extiende por el país. Yngvar Stubo, el comisario del servicio de criminología noruego encargado del caso, decide pedir la ayuda de Inger Johanne Vik, una psicóloga experta en perfiles. Ésta renuncia a colaborar. No quiere volver a ese trabajo. La perturba demasiado, pero no le quedará más remedio que inmiscuirse cuando aparezca la víctima de un asesinato sobre cuyo cadáver se ha escrito un inquietante mensaje: "Te lo merecías".

Castigo es una novela con un ritmo narrativo pausado, pero intrigante en la que no sólo buscamos secuestradores y asesinos, también el significado del título, aunque no daremos con su verdadero sentido hasta las últimas páginas. Esto favorece la avidez y apetencia lectora porque no hay mayor reto que la curiosidad y el deseo de saciarla. Eso se incrementa, además, con las diferentes perspectivas desde las que se relatan los acontecimientos que ayudan a llegar a un final, que no os voy a desvelar, por supuesto, impredecible. Es un buen desenlace en el que no hay precipitación.
Holt tiene cierto parecido a Mankell, aunque su literatura es más ligera. Ambos coinciden en la explotación de la imperfección de los personajes, lo que es un acierto. Sus debilidades y sus imperfecciones los acercan al lector y los hacen más verosímiles, aunque en el caso de Holt son menos profundos.

Una característica que me ha llamado mucho la atención (se ve en 'Castigo' y en el resto de sus novelas) es la gran importancia y el tiempo dedicado a la vida familiar de los protagonistas principales. No es que sean descripciones o escenas aburridas, cansadas o excesivas, pero es curioso ver cómo poco a poco, sin darte apenas cuenta, sus vidas no te son ajenas. Holt intenta que sus personajes no sean máquinas de resolver casos o personas dedicadas única y exclusivamente a su trabajo. La autora quiere que sus vidas sean parecidas a las de cualquier otro, con sus días buenos y sus días malos, con sus preocupaciones, alegrías, obligaciones, etc.

Uno de los temas sobre los que gira la novela es la relación de niños y adultos, y la violencia que a veces se ejerce sobre los menores, y Holt lo narra con tacto, sin caer en la brutalidad o el horror gratuito, pero sin olvidar que la crueldad existe.

Es una buena novela, contenida, sin prisas, y entretenida. Es bastante ligera y fácil de leer. Tiene un argumento sólido, sin fisuras y eso que la trama, con varias investigaciones simultáneas, tiene lo suyo./Verónica García Peña autora de 'De cómo Feliciano San Feliz quiso matar a sus vecinos'.