{ARTÍCULOS DE OPINIÓN}

Las diferencias del correr, los años 70 y la actualidad

por Juan Carlos Traspaderne

Mi experiencia de cuarenta y tres años en este mundo del correr me permite exponer cuánto hemos cambiado en las formas desde los años 70 a la actualidad.

1- Antes, éramos corredores, todo lo más corredores pedestres. Ahora, hay que ser runner ¿Será que se han caído del DRAE algunas palabras?

2- Antes, si practicabas la carrera a pie, estabas loco. Ahora, si no la practicas, estás loco.

3- Antes, las zapatillas eran munich o munich; bueno tampoco se tiene que exagerar, si tenías dinero podían ser hasta adidas… Ahora, son: pronadoras, supinadoras, neutras… para un peso corporal determinado, de asfalto, camino… todo ello multiplicado por no sé cuantas marcas. Jolines, ahora entiendo por qué me pierdo al comprar unas zapatillas.

4- Antes, después de entrenar, nos tomábamos unos impresionantes porrones de cerveza con gaseosa. Sabíamos que era malo… pero estaban muy ricos. Ahora, tomamos cervezas de diferentes marcas y diseños; pero estamos más tranquilos porque nos dicen que es alimento.

5- Antes, durante el entrenamiento tomábamos agua en las fuentes, si había fuentes claro. Ahora se programa previamente el número de geles y de bebidas a tomar y su distribución ¿Alguien sabe cuál es la bebida isotónica adecuada para él y el efecto de los geles sobre la insulina y si se toman con poca hidratación?

6- Antes, el control del entrenamiento se realizaba con un cronómetro mecánico y tenerlo era un lujo, tiempo total y alguna referencia de distancia que teníamos, por ejemplo, el puente de hierro mide 333 m. Ahora, si no sabemos el tiempo de paso de cada uno de los 100 m de nuestra sesión de carrera, no somos nada.

7- Antes corríamos 10.000 metros en una pista de 400. Ahora se corre un 10 K, perdón 10,7 K porque se considera verdad absoluta que todos los circuitos están mal medidos estén o no homologados. Incluso la pista, mide más de 400 m. Gracias GPS por vuestra exactitud y ayudarnos a descubrir nuestra verdadera valía.

8- Antes, el coste económico de la actividad era unas zapatillas a cambiar por abrasión de la suela, un chándal (cuando no era del club), dos o tres camisetas y unos pantis a modo de mallas, perdón se me olvidaba el coste de la licencia. Ahora el coste es zapatillas a cambiar cada 600 Km, zapatillas voladoras para competir; es decir, qué menos que tres pares cada temporada, ropa técnica, GPS con pulsómetro de última generación que nos dice… ufff, gafas de sol para evitar quemaduras, inscripciones en las carreras (eso sí, nos dan una camiseta), geles y complementos, fisioterapeuta, estudios de esfuerzo, el dietista. etc. Nota.- Pongo etc. porque algo se me olvida seguro. Demonios y luego dicen que esto es barato.

9- Antes, el entrenamiento invisible consistía en unos ricos bocadillos y en una dieta mediterránea de gran calidad, análisis médicos cuando considerábamos conveniente y procurar dormir lo suficiente. Ahora, visita al fisio una vez por semana a ser posible, dietas llenas de suplementos, visita al podólogo, pruebas de esfuerzo, todo ello enmarcado en una dieta cada vez menos mediterránea. Eso sí, seguro que igual se duerme menos y tomamos los mismos cubatas.

10- Antes, entrenábamos por montes y éramos unos temerarios. Ahora, somos superhombres y lo que hacemos es ultra trail que, por cierto, no sé lo que es, si seré paleto. Eso si, aconsejable llevar GPS y móvil.

11- Antes, el objetivo era hacer una marca en una prueba. Ahora se hace la prueba de esfuerzo que nos dice la marca que podemos hacer. Claro está que el problema, antes y ahora, es hacer la marca.

12- Antes comentábamos, y no siempre, con nuestro círculo de entrenamiento y nuestros amigos, cómo iba nuestra preparación y nuestras marcas. Ahora, si no tienes “5.000” seguidores en las redes sociales que te sigan en cada entrenamiento y competición no eres nadie.

Estas son algunas de las diferencias entre el antes y el ahora a la hora de practicar el deporte que es para mí es el más gratificante y enriquecedor que existe. Otro día escribiré sobre los puntos comunes entre el antes y el ahora. De momento me limitaré a exponer una cosa que no ha cambiado; “Lo libre que se siente uno practicando este deporte y cómo nos hace encontrarnos con nosotros mismos”... no perdamos jamás esto./Juan Carlos Traspaderne, atleta olímpico.