3048

{ARTÍCULOS DE OPINIÓN}

Vivir dentro y fuera de las palabras

Hoy es el típico día que uno se pone delante del ordenador y las teclas se quedan mudas. ¿Por qué? Por la sencilla razón de que la cabeza está a otras cosas. Está sumida en una fantasía nueva, un proyecto que durante meses ha estado imaginando, creando y dando forma. Una nueva historia que transcurre entre bruma y lluvia, y que consume tiempo, energía y los dedos de quien os habla.

 

Las historias son así o, quizá, los escritores somos así. Nos metemos tanto en el nuevo mundo que creamos que, a veces, nos cuesta mucho salir de él. Los personajes, como sombras, nos acompañan a cada paso, respirando cerca, y haciéndonos partícipes de cada uno de sus movimientos. ¿Qué sería de ellos sin nosotros? ¿Qué sería de nosotros sin ellos?
En la cabeza resuena su voz, como si fuera una parte más de la conciencia. Resuena y nos llama para que no les abandonemos, para que sigamos con ellos incluso en sueños.


Personajes, situaciones, lugares… inventados o no, nos acompañan y nos cuidan, como nosotros a ellos. Somos una misma moneda sin saber muy bien quién es la cara y quién la cruz. Quizá, por eso, estos últimos días en los que, poco a poco, nos tenemos que ir separado, siempre caigamos de canto.


Durante meses hemos compartido vivencias, pasiones y anhelos pues los suyos, son los nuestros. Se convierten, desde el mismo momento que los alumbramos, en una parte más de nosotros y de nuestra vida, y es por ello muy difícil dejarles marchar. Pero hay que hacerlo. Debemos hacerlo. Cada uno debe seguir su camino.


Es tiempo de reposo, sobre todo para ellos. Tiempo en el que alejarnos sirva para que el reencuentro, en unas semanas, valga para que nos contemos aquello que hay que cambiar y mejorar. Para que los personajes nos abracen de nuevo y nos digan, bajito al oído, es por aquí por donde quiero ir.


Vivir dentro y fuera de las palabras, de las historias. Eso hacemos los que escribimos. Eso hacemos los que soñamos. Eso hacemos./Verónica García Peña autora de 'Bendita Palabra' y 'De cómo Feliciano San Feliz quiso matar a sus vecinos'



Autor: Verónica García Peña

Suscripción a la Newsletter Enviar