{CULTURA / CINE}

Tabernero rodará 'Presentimientos' con Marta Etura y Eduardo Noriega

El director de cine y periodista contempla el futuro de la televisión asociado a internet

Santiago Tabernero ya está inmerso en una nueva aventura cinematográfica. Lo cierto es que la empresa comenzó hace tres años, cuando decidió adaptar 'Presentimientos', la novela de su amiga Clara Sánchez y buscar la complicidad en la escritura del guión del actor Eduardo Noriega. "Un buen amigo al que siempre le decía que tenía que escribir, que veía las películas como guionista". En pleno proceso de preproducción, el inicio rodaje está previsto para finales de septiembre o comienzo de octubre, Santiago Tabernero repasa una trayectoria ligada al cine y a la televisión, desde sus primeras críticas cinematográficas estando aún de prácticas a la puesta en marcha de programas de televisión como 'Versión Española', 'Carta Blanca', 'En Familia' o 'La Nube' -siempre innovadores-, además de 'Vida y Color', su primera película como director. Refelxiona sobre el futuro de la cultura y ve internet... y la necesidad de "mover ficha"... "en poco tiempo cada uno veremos lo que queramos y a la hora que queramos"... como dice, la idea de la cabecera de Los Simpson corriendo al sofá para ver el programa favorito todos juntos pronto será historia./Javi Muro.

Spoonful.- Estás ya centrado en una nueva aventura como director de cine, ¿no?

Llevo ya tres años trabajando en un proyecto para cine; una novela de Clara Sánchez, que se titula ‘Presentimientos’. Soy muy amigo de Clara, leí la novela antes incluso de que saliera a las librerías y me pareció que tenía un peliculón y ya desde entonces intenté encontrar cómplices para la historia. Al primero que pillé fue a Eduardo Noriega, que es buen amigo. El nunca había escrito nada, pero yo siempre le decía, Eduardo tienes un criterio, ves las películas desde dentro como actor, pero luego tienes un pensamiento de guionista, seguro que algún día terminarás escribiendo un guión. Así que le dije, ha llegado el momento de hacerlo y además, con el beneplácito permanente de Clara. La verdad es que ha sido un bonito camino, la escritura nos ha hecho más amigos y además escribimos el guión pensando en que él fuera el protagonista; aunque el papel principal de la película es el de la chica, que será interpretada por Marta Etura.

S.- Cuéntanos algo de la historia…

Un matrimonio joven con bebé, que están en crisis y que se van de vacaciones a la costa. El protagonismo es, principalmente, del personaje femenino. Después de muchas vueltas y revueltas conseguimos -parece- comenzar la preproducción de la película y la rodaremos en Alicante a finales de septiembre o comienzos de octubre.

S.-¿Con un poco de miedo o precaución al abordar un proyecto como este?

Precaución toda y un poco de miedo también. Es una pequeña historia, en cuanto a coste es una película de presupuesto medio de cine español, en torno a los tres millones de euros. Pero las cosas están muy mal. No se está rodando cine y a las televisiones cada vez les cuesta más entrar en inversiones de cine, igual les sucede a las entidades públicas. Todo está cada vez más difícil. Al final la película la vamos a hacer con medios muy ajustados, pero esto también supone la posibilidad de plantearse las cosas de otra manera, de suplir con imaginación y entusiasmo lo que no se puede conseguir por otros medios. Estoy muy contento, tenemos un gran equipo y tenemos una gran historia y va a salir una buena película.

S.- Tres años de trabajo, ¿Cómo se mantiene la ilusión?

Evidentemente, no son tres años trabajando todos los días en la película. Pero si son tres años de continuidad en el trabajo. Era la primera vez que yo me metía en la adaptación de una novela y no es fácil; la novela tiene 500 y el guión tiene 95 folios; convertir 500 páginas en un guión de 90 es una labor de síntesis y de comprensión profunda de la historia. Eso que hemos oído mil veces de que para ser fiel a una adaptación hay que traicionarla es cierto. En la adaptación que hemos hecho Eduardo y yo hemos traicionado en muchas ocasiones a la novela y hemos buscado otras soluciones a conflictos interiores de la novela, para al final tener la sensación de que le hemos sido tremendamente fieles. Así lo piensa también Clara, que ha sido muy indulgente. Tengo la sensación de que hemos movido todo para al final contar la misma historia que cuenta la novela. Ese trabajo nos ha llevado tres años. Son también tres años de búsqueda de producción y de búsqueda de otros cómplices. Después de ‘Vida y color’ tenía muchísimas ganas de volver a dirigir. Hacer cine es un milagro tan extraordinario y tienen que darse tantas coincidencias, coincidir tantas coyunturas en alineación… me ha costado mucho conseguirlo. Cuando terminé ‘Vida y Color’ no me vinieron cientos de productores a ofrecerme proyectos. Esto ha sido un trabajo perseverante, tenaz…
S.- ¿Cuándo te das cuenta de que un guión está terminado? Supongo que hay que darle muchas vueltas y más cuando se trata de una adaptación y encima tienes el final con el que concluye la novela…

Es verdad lo que dices. Ahora mismo tenemos la versión nueve del guión y hasta llegar a esa versión no tuve la sensación de que había terminado; veía que a cada versión el guión iba mejorando, que a cada versión se multiplicaba la complejidad de sus tramas y subtramas y los choques de unos personajes con otros. La novela juega en otro territorio, la novela juega en el terreno de la literatura y con el objetivo de que la lectura sea un placer, el guión no pretende eso; el guión tiene que velar simplemente por la fluidez del desarrollo de la historia; es algo muy complicado. Por lo menos para mí lo es. En esta novena versión, terminada hace dos meses, no sé porqué pero de repente hizo click algo y todo empezó, como en un juego de tetris, a encajar y se produjo esa extraña armonía que nos dio la certeza, tanto a Eduardo como a mí, de que habíamos terminado. Ahora seguro, con el rodaje y las localizaciones, el guión seguirá desarrollándose, pero ahora ya tenemos una gran historia, un buen guión. Y aunque los medios económicos son muy justos, creo tenemos lo más importante y ahora lo que tenemos que hacer es confiar mucho en el trabajo de los actores.

S.- ¿Cómo llegas al cine? ¿Cómo decides que este va a ser tu camino?

Bueno, yo me considero fundamentalmente periodista. Al periodismo he dedicado el ochenta por ciento de mi vida profesional, pero ha sido una vocación periodística asociada a mi segunda vocación que es la cinematográfica. Como periodista en prácticas, como aprendiz, lo primero que hice fueron críticas de cine en el periódico La Rioja y me curtí haciendo entrevistas a directores y actores en los festivales de cine. Luego ya en televisión, empecé –hace ya la friolera de 23 o 24 años, haciendo reportajes y críticas de cine, por ejemplo en Informe Semanal, o haciendo making off, siempre he estado vinculado al cine… luego ‘Versión Española’. En ‘Días de Cine’ conocí a Daniel Monzón que luego ha tenido una exitosa carrera como director de cine y con el escribí mi primer guión de cine ‘Desvío al Paraíso’. Desde entonces siempre he estado ligado al cine y esperando hacer cine. Después surgió el milagro de dirigir ‘Vida y Color’, porque yo ya me daba por vencido en lo que respecta a dirigir. Me contentaba con haber llegado a guionista y me parecía que era un camino precioso en sí mismo. Pensaba que si cada tres o cinco años era capaz de escribir un guión y conseguía que alguien lo dirigiera yo estaría muy feliz. Con ‘Vida y Color’ los productores me ofrecieron dirigirla yo como dicen dirigir es el scalextric o el tren eléctrico mayor que pueda encontrar un niño, es un juguete multitarea y moría por volver a tener la oportunidad de dirigir después de ‘Vida y Color’. De nuevo tengo la oportunidad, me tiemblan las piernas pero estoy encantado.

S.- Hoy parece haber una gran conexión cine-televisión como evolución de los creadores, las series son un buen ejemplo… ¿Te gustaría dirigir una serie de ficción para la televisión?

Si.  Con respecto a mi trabajo en televisión, de mi trayectoria en Televisión Española, soy un afortunado. He realizado todo tipo de formatos televisivos y he tenido la suerte de dirigir programas muy diversos, grabados, en directo; en mi vida hubiera pensado que iba a terminar dirigiendo el especial de Navidad de Raphael. Lo último que he hecho ha sido ‘La Nube’, con Toni Garrido. He hecho cosas muy distintas, pero nunca he hecho ficción y quiero dirigir ficción televisiva, por supuesto. De alguna manera siento que ‘Presentimientos’ es una forma de asentarme en la ficción, que cuando termine la película y salga bien mi siguiente paso en Televisión Española será en el área de ficción.
S.- Y del proyecto sobre el ‘Capitán Trueno’, que alguna vez te he oído hablar…

Si bueno. Hacer una buena película es muy importante. En primer lugar para que cuando vuelva a Televisión Española poder hacer ficción y, en segundo lugar, para sacar adelante ‘Capitán’. ‘Capitán’ es un proyecto muy querido, cuando terminé ‘Vida y Color’, lo siguiente que escribo es ‘Capitán’. Lo que pasa es que es una historia de época, ambientada en el Edad Media, es una historia de héroes crepusculares, de aventura. Es una historia cara, tampoco mucho, no hay grandes batallas, pero requiere una envergadura que yo ahora no tengo el aval necesario para que un productor confíe en mí. Después de ‘Presentimientos’, ‘Capitán’ tiene más posibilidades de salir del cajón.

S.- Siguiendo con la televisión has dirigido y puesto en marcha ‘Versión Española’, ‘Carta Blanca’, ‘En Familia’, ‘La Nube’ ahora. Todos son innovadores en su día, rompedores con lo que se hacía, ¿es una de tus normas o una filosofía de trabajo al iniciar un proyecto?

Evidentemente, yo no era consciente cuando surgieron estos proyectos de lo innovadores que podían ser.  Pero vistos en perspectiva sí que me siento afortunado de haber estado en el equipo que generó esas historias. ‘Carta Blanca’ es, de todo lo que he hecho en televisión, el que me provoca un recuerdo de mayor satisfacción. Creo que fue un proyecto tan lindo, tan novedoso. Ahora mismo voy con el proyecto de ‘Carta Blanca’ a televisión y no prospera. Sucedieron una serie de casualidades. En la dirección de La2 estaba Curra, un persona sensible que entendió el proyecto y apostó por él; además, tuve absoluta libertad para elegir a mi equipo creativo; en aquellos tiempo podías formar equipos con gente de fuera de la Casa. Ahora me dirían haz ‘Carta Blanca’ si quieres pero con gente de la plantilla. El resultado fue espectacular; la gente habla de él como un programa de culto. Fueron trece ‘cartas blancas’ más uno de resumen y en cada programa el presentador tenía carta blanca para hacer lo que quisiera. David Trueba, Antonio Escohotado, Isabel Coixet, Ray Loriga, Alaska, la Terremoto de Alcorcón… pudieron hacer un programa de hora y media como quisieron… Estoy muy orgulloso de haber hecho ese programa.

S.- ¿Se volverá a hacer algo como ‘Carta Blanca’?

Yo les propuse hacer una nueva tanda de ‘Carta Blanca’, incluso pensando en La Primera, con gente más cercana al gran público, no tan camicaces como los que yo elegí. Pero después las cosas ya comenzaron a complicarse en televisión y era más difícil hacer proyectos creativos como estos. Sobre todo, después de ‘Carta Blanca’ lo que hice fueron muchos musicales. Empecé con ‘Papito’ de Miguel Bosé, y después Alejandro Sanz, Luz Casal y Rapahel, que fue maravilloso.

S.- ¿Y ‘La Nube’ seguirá? También ha sido un programa innovador…

De ‘La Nube’ estamos también muy orgullosos como programa. Ha sido una maravilla y con la sensación de estar haciendo un programa entre la divulgación y el entretenimiento puro sobre un tema que no había sido tratado en televisión, como es la sociedad de internet. Y la Sociedad de Internet, que es en la que ahora vivimos y que nos afecta a todos es un tema apasionante. La vida, delante de nuestros ojos, está cambiando cada día a nivel tecnológico, pero también humano, de relaciones personales. Hemos hecho un programa semanal para hablar de eso y hemos podido traer a gente muy interesante. Además, teníamos un conductor del programa carismático, inteligente, oportuno, como es Toni Garrido. Ha sido una maravilla. Toni levantó la audiencia de las tardes de RNE y se metía entre pecho y espalda un programa diario de tres horas; tiene un increíble sentido del directo y de la entrevista como espectáculo. Es un programa patrocinado por Movistar y nos consta que están muy satisfechos. Lo que pasa es que ahora con los nuevos nombramientos y la nueva política de programación no tengo ni idea de lo que va a suceder. Y luego, que en términos de audiencia, la respuesta ha sido muy tibia. Hay que tener en cuenta que era un programa que se emitía en La2 a las once de la noche y sobre un tema que a una gran parte de la audiencia le provoca rechazo o se siente ajeno.
S.- Pero hoy en día las audiencias hay que empezar a medirlas de otra forma, ya que hay mucha gente que ve los programas horas más tarde o al día siguiente a través de las páginas web de las televisiones…

Claro, claro. Es una cosa que pasaba con ‘La Nube’, y creo que en eso también hemos sido pioneros, el programa duraba noventa minutos, pero sólo los sesenta primeros se emitían por televisión, luego el debate se emitía en streaming a través de la web del programa. Y luego un medidor como Twitter donde todas las semanas éramos trendi topic durante la emisión. Teníamos muchísimas visitas y descargas en la página. Es cierto que el tiempo de la medición de audiencias tradicional está terminando. Ahora hay que medir las cosas de otra manera. Con la incorporación de internet hay que pensar en otras varas de medir. Ha sido un bonito éxito, aunque en términos de audiencia hablen de fracaso. Yo creo que en muy pocos años las cadenas generalistas habrán desaparecido o tendrán audiencias residuales. Lo que va a crecer son las televisiones temáticas y ahora con la televisión asociada a internet cada espectador va a ser su programador. ¿Cómo se va a medir esto? No lo sé, pero ese concepto de la cabecera de Los Simpson en el que comienza el programa favorito de la familia y todos corriendo al sofá para verlo todos juntos eso ya ha desaparecido hace muchísimo tiempo. Cada uno va a ver lo que le apetezca a la hora que le apetezca.

S.- Volviendo al tema de la cultura, ¿cómo la ves en esta situación de crisis?

La verdad es que son tiempos muy desmoralizantes. También internet ha producido un vuelvo en la industria cultura al que todavía no hemos reaccionado, ha provocado la caída de la industria cultural tal y como la conocíamos. Desaparecen discográficas, editoriales, medios de comunicación, la producción y consumo de productos audiovisuales, cierran cines y, sin embargo está claro que la gente sigue necesitando, sigue consumiendo y sigue demandando, por ejemplo, películas, historias, novelas, cuentos… Incluso está cambiando con la tecnología la forma de leer y, por lo tanto, la forma de escribir. Ahora el escritor puede incorporar en su relato fotos, vídeos, bibiografía… está apareciendo otro tipo de relato literario. Estamos todos en mitad del seísmo gritando, unos huyendo despavoridos, pero por otra parte es una situación extraordinariamente excitante. Está provocando que la industria cultural mueva ficha, que asimile los cambios, los entienda y apueste por ellos. Están pasando cosas increíbles ante nuestros ojos.

… probablemente, dentro de unos años, las películas se estrenarán mundialmente on line y tu las verás en tu gigantesca pantalla y lo verás en streaming. El consumo se va a reorientar y el pirateo se va a controlar; se van a encontrar formas de ordenar el flujo y la demanda dentro de la red. Creo que va a ver sitio para los spilbergs del mañana y también para el cine experimental y los nuevos narradores. Al final, como siempre, lo importante van a ser las historias, la fascinación de la historia que estás contando.

S.- ¿Qué te parece la opción que tomado Paco León a la hora de presentar y distribuir su película a través de internet, dvd, salas, venta a través de la prensa...?

Pues me parece que en España alguien tenían que hacerlo y ha sido él. Con mucha suspicacia de la industria, sobre todo de los exhibidores que ven en ese planteamiento que peligra su status… pues claro que peligra; hemos quedado en que todos tenemos que mover ficha. El que no lo haga será víctima del tsunami digital en el que vivimos. Creo que Paco León ha sido muy avispado y que además le ha salido muy bien.