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{CULTURA / EXPOSICIONES}

Defensores del débil y paladines de la justicia

El CBA expone Capitán Trueno. Tras los pasos del héroe, literatura, arquitectura, técnica y política

Varias generaciones recuerdan los buenos momentos proporcionados por la lectura de las aventuras de El Capitán Trueno, su amada Sígrid y sus amigos Goliat y Crispín. Creado a mediados de siglo XX por el escritor catalán Víctor Mora y el dibujante Migue Ambrosio Zaragoza, Ambrós, el Capitán Trueno es uno de los títulos icónicos de la cultura de la España del pasado siglo. La serie capturó a miles de lectores desde su primer cuadernillo, editado en 1956, hasta bien entrada la década de los sesenta. Unos seguidores que se multiplicaron tras las sucesivas reediciones y que continúan manteniendo vivas las aventuras del superhéroe hasta hoy mismo.


Ahora, el Capitán Trueno –por supuesto acompañado de sus inseparables amigos- se ha  instalado en la Sala Goya del Círculo de Bellas Artes de Madrid. Allí, hasta el 29 de enero de 2017, una exposición cubre tanto la faceta artística del cómic como la historia de sus creadores y los retos de su producción. La muestra incluye primeras ediciones del cómic acompañadas de libros a los que se alude en los cuadernillos, aunque tal vez lo mejor y más sorprendente sean  los originales elaborados por algunos de sus sucesivos dibujantes.


Apunta el catálogo ‘El Capitán Trueno. Tras los pasos del héroe’ que “la catalogación que lo sitúa como cómic de aventuras es a la vez exacta y falaz. De aventuras se trata, sin duda. Pero, por suerte, tanto las vicisitudes del guión como el genio desigual de los sucesivos dibujantes propiciaron unos encuentros que esta exposición pretende explorar: encuentros con la literatura, por cuanto El Capitán Trueno repite o imita episodios que se pueden hallar en la Iliíada o en la Odisea, en Verne o en Swift, en Shakesperae, en Cervantes, en el legado de las Eddas y de las sagas, en Gilgamesh o en Rabelais”.

 

Los cuadernos de El Capitán Trueno propicián también encuentros con la arquitectura. “Grandes construcciones y pequeñas arquitecturas vernáculas fueron avistadas en España, quizá por primera vez, en la aventura de Trueno, que recorrió el mundo y censó sus paisajes, naturales y urbanos”. Y encuentros, , finalmente, con las disciplinas técnicas, “tanto con la pretérita como con la futura: semanas en globo antes de que tal artefacto existiera, pólvora cuando ese elemento era solo una diversión oriental, y presencia de la balística y la robótica”.

La exposición está vinculada, en sus tres espacios temáticos -literatura, arquitectura, técnica-, por un hilo conductor político. “Son las historias de un español que no hace pie en España, las de un permanente exiliado con añoranza, las de un paladín de la libertad y la justicia en una época de dictadura. Con todas sus ambigüedades y todos sus equívocos. Con toda su sagacidad”.


El recuerdo de Víctor Mora está presente en la exposición que se convierte en un homenaje al creador de un cómic imprescindible en la historia de España.


'El Capitán Trueno. Tras los pasos del héroe' se propone reseñar alguno de los hilos que tejen la aventura interminable de uno de los personajes más significativos de la cultura popular de la segunda mitad del siglo XX. Todo ello sin olvidar que el Capitán Trueno y sus compañeros, defensores del débil y paladines de la justicia, son un importante eslabón en la cadena de la reflexión política y moral que se ha vertido sobre varias generaciones de lectores./Javi Muro

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